Homeopatía para tratar las afonías o ronqueras de los niños

Con motivo del Día Mundial de la Voz que se celebra el día 16 de abril, el Dr. José Manuel Roqués Calamita nos cuenta qué podemos hacer para cuidar la voz de nuestros hijos y cómo se debe tratar. Los problemas leves o agudos aumentan en invierno por las infecciones favorecidas por el frío, también en primavera en los alérgicos.

Los problemas crónicos o ya establecidos no tienen fecha, dependen más de la cantidad de uso de la voz y de las condiciones en que se usa. Hay disfonías por ocio, por ejemplo, en el caso de los jóvenes que salen el fin de semana, vuelven roncos a casa, se recuperan a lo largo de la semana y el siguiente fin de semana están de nuevo roncos.

Causas de la afonía en los niños

Las causas más frecuentes son: la carga vocal excesiva, la mala higiene vocal y el mal uso de la voz. También hay procesos infecciosos, alérgicos, digestivos, hormonales que pueden favorecer la aparición de una disfonía y ayudar también a mantenerla. Por eso es importante acudir al pediatra o al especialista cuando sea necesario para valorar el problema y detectar todos los factores de riesgo. De esta manera se puede manejar el caso de la forma más amplia posible para aliviarlo y/o resolverlo.

Cuándo se puede tratar la afonía en los niños

En los niños tenemos que descartar lesiones congénitas, hay niños que al nacer tienen el llanto ronco y ya podemos sospechar que ocurre algo. En niños más grandes los problemas obstructivos como amigdalitis y vegetaciones o las alergias favorecen el desarrollo de la disfonía y de lesiones en las cuerdas vocales. A veces no trabajamos con el niño por su corta edad o por sus características y sí con la familia para que maneje adecuadamente el cuidado de la voz en casa. Más adelante, cuando el niño tenga capacidad de implicarse, se trabajará directamente con él. De ahí hasta cualquier edad se puede realizar el trabajo rehabilitador y cuanto antes mejor.

Consejos para padres de niños afónicos

Normalmente, la inquietud de los padres suele ser el motivo de consulta al pediatra, que debe de derivar a la menor duda al especialista.

En general toda ronquera que dure más de 10 días o las situaciones de ronquera frecuente (cada salida de fin de semana, cada vez que se habla más de lo habitual...) debe ser valorada. Cuanto antes diagnostiquemos más fácil y menos costosa será la recuperación.

Consejos para mejorar la calidad de la voz de los niños

Los ejercicios deben ser dirigidos por un profesional (Foniatra y Logopeda) después de un diagnóstico preciso.

De forma general hay unas medidas de higiene vocal básicas que no dejan de ser normas de vida sana:

- No gritar de forma habitual y controlar el volumen de la voz

- Tratar las alergias, catarros y problemas digestivos cuando se produzcan

- Dormir lo suficiente y hacer ejercicio físico con regularidad

- Beber agua abundantemente y llevar una alimentación sana (dieta mediterránea)

- Valorar rápidamente a los niños con llanto ronco para descartar problemas congénitos

- Consultar con el médico si la ronquera dura más de 10 días.

Cuándo la disfonía persiste en los niños

Si la disfonía está producida por infecciones, alergias, reflujo gastro-esofágico u otras enfermedades que afectan a la voz y que se puedan beneficiar de fármacos, claro que se utilizan.

Antibióticos, antiinflamatorios, fármacos homeopáticos, protectores gástricos, tratamientos hormonales, relajantes musculares, antitusígenos, antihistamínicos, serían los más frecuentes. De todas formas el tratamiento fundamental en la disfonía es el habilitador o rehabilitador, el conocimiento por parte del paciente, en este caso de los padres, del problema, y el aprendizaje de cómo hacer las cosas mejor para manejar la voz sin esfuerzo y de forma cuidadosa.

Beneficios de los medicamentos homeopáticos

Una vez realizado el diagnóstico y el plan de tratamiento por parte del médico se pueden utilizar estos fármacos homeopáticos solos o combinados con otros tratamientos. Las ventajas son la escasa presencia de efectos secundarios y de efectos adversos, el uso sin riesgos en niños y la posibilidad de uso combinado con otros tratamientos.

En el caso de las disfonías es especialmente útil en procesos agudos (faringitis y laringitis agudas), en el tratamiento de las alergias a neumoalérgenos (ácaros, pólenes, mohos...) y en procesos cicatriciales postquirúrgicos entre otros.