10 cosas sobre la alimentación infantil que debes saber

¿Te preguntas si estás haciendo lo correcto con la alimentación de tus hijos? En este artículo te desvelamos 10 cosas sobre la alimentación infantil que has de conocer para erradicar los mitos, aportar consejos respaldados por la ciencia y ofrecer una hoja de ruta práctica para garantizar que tus pequeños reciban la mejor nutrición posible. Y todo ello de la mano de una nutricionista especializada en el ámbito infantil. ¡Descubre cómo hacer que la hora de la comida sea un momento de crecimiento y conexión para toda la familia!

Consejos de la nutricionista sobre la alimenttación infantil

1. Lactancia materna como base de inicio: la lactancia materna proporciona nutrientes esenciales y fortalece el sistema inmunológico del bebé. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la lactancia exclusiva durante los primeros seis meses de vida y posteriormente en combinación con otros alimentos hasta los dos años de edad.

2. Nutrientes importantes para el crecimiento: la alimentación infantil deber priorizar nutrientes claves para el desarrollo óseo, cognitivo y del sistema inmunológico como son el calcio, el hierro, el zinc, la vitamina D y la C.

3. Ofrecer variedad de alimentos: introducir diferentes alimentos en la dieta desde edades tempranas ayuda a crear preferencias saludables, y asegura una ingesta equilibrada de nutrientes. Del mismo modo para las diferentes texturas, aumentando la aceptación por una gama más amplia de alimentos.

4. Atención a posibles alergias: al introducir nuevos alimentos, es vital estar atentos a posibles reacciones alérgicas, y consultar a un especialista antes antecedentes familiares de alergias. Ya sabéis que la exposición es de uno en uno y dejando intervalos de tiempo entre la introducción de uno y otro.

5. El apetito de los niños es fluctuante: la mejor herramienta para estimar la cantidad de alimento que un niño debe ingerir son sus propios mecanismos de apetito-saciedad. Su apetito se adaptará a las diferentes fases de crecimiento para ajustar sus necesidades calóricas. Es más importante poner el foco en la calidad de lo que ofrecemos a los niños, que en la cantidad.

6. Reducir alimentos ultra procesados: evitar el consumo de alimentos altamente procesados, ricos en grasas, azúcares y sal, fomenta una dieta más equilibrada y ayuda a prevenir problemas de salud futuros.

7. Ser ejemplo de buenos hábitos alimentarios: como padres jugamos un papel esencial en la adquisición y modulación de hábitos alimentarios saludables. Comer juntos en familia y en un ambiente distendido, promueve una conexión positiva con la alimentación.

8. Involucrar a los niños en las tareas de compra y cocinado de alimentos: esto permite que los niños participen en la elección y preparación de alimentos, fomentando su interés por la comida, y creando un espacio de educación alimentaria por parte de los padres.

9. No necesitan "comida especial para niños": la comida es comida, para niños y para adultos. Podemos cambiar la textura o las porciones, pero lo único que necesita un bebé es leche materna, y a partir de los seis meses, comida saludable.

10. Neofobia alimentaria: el significado literal es "miedo a probar nuevos alimentos", y el cincuenta por ciento de los niños a los dos años son neofóbicos, sin que esta conducta represente un riesgo para su salud. Pueden existir múltiples causas pero ninguna justifica obligar a un niño a comer.

Yolanda Moreno González
Dietista - Nutricionista