Fuera de juego. Libro ilustrado para niños

Matthias Sindelar, el futbolista que se enfrentó a Hitler

El fútbol es una de esas actividades capaces de mostrar lo mejor y lo peor del ser humano. Entre sus cotidianas manifestaciones de fanatismo, garrulería y egolatría, de vez en cuando surge algún emocionante ejemplo de deportividad y dignidad.

Este libo cuenta una de esas historias, la de Matthias Sindelar, el Mozart del fútbol, considerado como el mejor deportista austriaco del siglo XX. Un futbolista que defendió sus principios con el balón.

Goles contra balas

Austria, años 30 del pasado siglo. La selección austriaca de fútbol vivía su época dorada. En aquel maravilloso equipo sobresalía su capitán, Matthias Sindelar, un habilidoso delantero cuya superioridad técnica lo encumbró como una de las figuras de la década.

Pero llegó la primavera de 1938 y con ella la anexión de Austria por parte de la Alemania nazi. Conscientes de la importancia propagandística del deporte y con el mundial del 38 en ciernes, los jerarcas del régimen decidieron anexionarse también la selección austriaca incorporando sus mejores jugadores a la alemana. Para celebrar ambas anexiones, nada mejor que un encuentro de fútbol entre Alemania y Austria, en el que sería el último partido de esta selección. Con Hitler en el palco, y para que la fiesta fuera total, Austria recibió la orden de dejarse ganar.

Pero Sindelar, de origen judío, no estaba dispuesto a participar en tal bufonada y lo demostró de tres formas. Primero, fallando clamorosamente clarísimas ocasiones de gol, evidenciando así la consigna recibida de no ganar. Luego, marcando el gol que supuso la victoria de Austria. Por último, celebrando el gol bailando ante Hitler, en vez de con el saludo nazi.

Por si esto fuera poco, alegando lesión tras lesión, nunca jugó en la selección alemana, perdiéndose el mundial de ese año. Nadie podía hacer tales desplantes al régimen nazi y vivir mucho tiempo. En 1939, Matthias Sindelar fue hallado muerto en misteriosas circunstancias.

"Sin héroes todos somos gente normal y no sabemos lo lejos que podemos llegar", escribió Bernard Maloe; pero uno de los problemas de los niños de hoy es que muchos de ellos tienen como héroes a ídolos de barro escasos en valores. Este libro les muestra un verdadero héroe, un ejemplo de dignidad de alguien que se mantuvo fiel a sus principios a costa de su profesión y su vida.