Mantenerte activa durante el embarazo

El embarazo es un estado fisiológico normal que implica ciertos cuidados extra pero, es importante realizar ejercicio y trabajos moderados. Por tanto, puedes seguir desarrollando tu profesión aunque la práctica de una determinada actividad laboral depende del tipo de trabajo, del estado de salud de la gestante y del tiempo de gestación transcurrido.

Vida laboral

En general, durante el embarazo puedes desarrollar tu trabajo habitual, siempre que no cause una fatiga física o psíquica excesiva, hasta el octavo mes de gestación. A partir de este momento debes reducir tu actividad, siendo recomendable el descanso laboral en las últimas semanas de la gestación. Las labores de hogar sin embargo, pueden ser realizadas con normalidad, excepto si existe alguna complicación como amenaza de aborto o parto prematuro.

Ejercicio físico

El ejercicio físico ayuda a mantener una buena salud en cualquier momento de la vida. Pero en el embarazo, la mujer sana tiene una tolerancia menor al esfuerzo físico. De manera que, como recomendación general, la mujer que los practica puede seguir con moderación en los primeros meses, pero las mujeres no entrenadas deben abstenerse en el embarazo. En general, es conveniente realizar un ejercicio físico moderado, aconsejándose los paseos, la natación y los ejercicios aprendidos en los cursos de educación maternal. No se recomienda la práctica de deportes violentos, de competición, o que produzcan fatiga. También se debe evitar realizar ejercicios que obliguen a permanecer en decúbito supino, los que requieran retener la respiración, o los que aumentan en exceso la temperatura de su cuerpo. Deben evitarse movimientos bruscos, saltos, flexión o extensión excesiva de las articulaciones, así como los impactos corporales. Cuando practiques un deporte debes ingerir cantidades adecuadas de calorías y líquidos para mantener una correcta hidratación.

Rita Salvador López, Matrona