Ana Navarro, experta en sueño infantil: Hay que elegir bien los cuentos para el ritual de sueño

Ana Navarro es fundadora de OUI Sleep, experta en sueño infantil y mamá. Conmishijos.com ha hablado con Ana sobre los hábitos de lectura con los peques, especialmente durante el ritual de sueño antes de dormir. 

Ana nos explica qué libros son más adecuados para leer antes de dormir, además de otros consejos útiles para trasladar a los niños y niñas el gusto por la lectura.

1. Cuéntanos tu experiencia con las revistas Bayard

La primera vez que fui a casa de mis suegros en Francia vi en la habitación de mi marido una estantería repleta de la colección de Popi, Pomme d'Api, J'aime Lire y Je Bouquine. Mis suegros son grandes lectores y han sabido inculcar su pasión por la lectura a sus hijos y ahora a sus nietos. A ellos les hacía ilusión que nosotros también recibiéramos un número cada mes y desde el primer cumpleaños de mi hija hasta los 3 años recibimos Popi y ahora, desde hace unos meses, recibimos Pomme d'Api.

Mi hija es la encargada de abrir el buzón todos los días y le encanta cuando llega su revista a su nombre a primeros de mes, es un momento muy especial para ella y ya en el ascensor abre el sobre.

A nosotros como padres nos gusta la calidad de la redacción de estas revistas, la calidad de las ilustraciones, la moral que hay detrás de cada historia y el hecho de que las revistas estén divididas por secciones, cada una con su personaje protagonista y su historia. 

2. ¿Qué crees que puede aportar la lectura a un niño?

La lectura solo puede traer ventajas a un niño. Leer de forma regular enriquece su lenguaje con un vocabulario más rico haciendo que puedan expresar sus opiniones y argumentos de una forma convincente y clara. La lectura también favorece su capacidad de atender, estar concentrado y prestar atención a detalles pequeños. Y a su vez, ayuda a desarrollar la memoria, hacer conexiones de la vida cotidiana y los cuentos, comprender mejor lo que leen, redactar mejor y cometer menos faltas de ortografía. 

3. ¿Qué debemos considerar a la hora de elegir un cuento para nuestros hijos?

Como experta en sueño infantil que trabaja con niños de hasta 5 años, animo a los padres a elegir bien los cuentos que leen a sus hijos en el ritual de sueño antes de dormir. Un buen cuento antes de dormir debería ser de papel, no digital, sin música, sin luces, sin escenas de miedo, sin escenas de mucha acción pero con detalles que favorezca su concentración para así desarrollar la capacidad de atención, su memoria y hacer que sus cerebros se cansen para conciliar mejor el sueño. 

4. Según tu experiencia, ¿qué podemos hacer para atraer a nuestros hijos hacia la lectura?

Lo ideal es atraerlos hacia la lectura desde los primeros meses de vida con cuentos de diferentes texturas, imágenes, colores y sonidos. Si incluimos pronto la lectura en el ritual de sueño, les vamos leyendo los cuentos poniendo voz a los personajes, cambiando la expresión de la cara según vamos leyendo y provocamos la generación de oxitocina, la hormona del amor, manteniendo un contacto físico con ellos (ya sean porque les leemos un cuento encima de nosotros o porque les acariciamos mientras leemos), esto hará que asocien ese rato de lectura con algo muy positivo. 

5. Comprar a un niño un libro y pedirle que lea, ¿es suficiente?, ¿qué otras estrategias podemos llevar a cabo para trasladarles la pasión por la lectura?

Al igual que si compramos un chándal y una bicicleta a nuestro hijo no asegurará que le guste el ciclismo, comprar un libro y pedirle que lea, no es suficiente para trasladarles el amor por la lectura.

Como padres tenemos que buscar estrategias en familia para conseguir que disfruten mientras leen. En mi casa, por ejemplo, hacemos lo siguiente:

- Los fines de semana que no hay colegio y no tenemos prisa para salir, mi hija se despierta y viene a nuestra cama con cuentos. Hay veces que los leemos sentados tranquilamente y otras veces hacemos una cabaña con el nórdico iluminando con una linterna pequeñita.

- La hemos llevado desde muy pequeña a la biblioteca infantil para pasar un rato allí. Hay veces que prefiere jugar a ver cuentos y también está bien. El simple hecho de jugar con personas alrededor que tienen un libro en las manos, es un buen ejemplo para ella.

- También nos acompaña a la librería a comprar su próximo cuento o un regalo de cumpleaños a un amigo. Echamos un vistazo a las diferentes secciones y le indicamos de qué estantería puede elegir su cuento, más que nada para acotar la edad. Con esto conseguimos que ella sienta que elige y que tiene poder de decisión con respecto a lo que lee.

- Intercambiamos juguetes y cuentos con un amigo suyo de la misma edad. Esto nos hace tener más diversidad en casa y reduce el presupuesto destinado a esto.

- También, a medida que crecen, es más fácil tener momentos para relajarnos, coger un libro, leer delante de ellos y darles ejemplo porque al final ellos nos imitan, para lo bueno y para lo malo. 

6. ¿Cómo competir con las pantallas?, ¿es una guerra perdida?

Hoy en día es difícil competir con las pantallas pero no es una batalla perdida en absoluto. Se recomienda no exponer a los niños a las pantallas en los primeros años de vida pero para muchas familias es difícil no hacerlo. Entiendo que la vida de hoy en día dificulta pasar ratos de calidad con nuestros niños y que darles una tablet sea la solución más fácil mientras cocinamos, hacemos las tareas de la casa o cuando necesitamos un momento de tranquilidad. Pero tanta exposición a las pantallas hacen que crezcan con menos paciencia, con más facilidad para aburrirse y con menos autocontrol. En mi opinión, la clave está en establecer límites, pactar el tiempo de exposición y encontrar dibujos de calidad.

Por ejemplo, si desde el principio decidimos que solo los sábados y domingos se puede ver un rato la televisión y esto lo cumplimos con amor y con firmeza, los niños acaban por aceptarlo y por buscar alternativas a las pantallas. Si decidimos que los días de diario pueden ver la tele o jugar con el móvil es muy importante establecer el tiempo máximo, por ejemplo, 30 minutos e ir recordándoles con ayuda de un reloj o con nuestras palabras, que en 5 minutos se acabará el tiempo.

En cuanto al sueño de nuestros hijos, exponerles a la luz de las pantallas antes de dormir inhibe la segregación de la melatonina, la hormona del sueño, y les agita. Por eso se recomienda que al menos 2 horas antes de llevarles a la cama, no haya pantallas de por medio.

7. ¿Cómo podemos asegurarnos que nuestros hijos entienden lo que leen sin parecer que les hacemos un examen?

Primero poniéndonos en su lugar. Si yo leo un capítulo de un libro y me dicen "hazme un resumen de lo que has leído" o "dime el nombre de los protagonistas", me incomodaría y pensaría que es un examen.

Antes de sacar el cuestionario de preguntas, deberíamos reforzarles y motivarles cuando leen. En lugar de felicitarles porque han leído ese día, se les podría motivar diciendo cosas como: "te he visto muy concentrado mientras leías", "cariño, no te he querido interrumpir mientras leías porque he visto que estabas sumergido en el libro". Con este tipo de frases valoramos el esfuerzo en el proceso y no el objetivo final, leer el libro entero y rápido.

También, para comprobar que entienden lo que leen, hay que buscar momentos que no parezca un interrogatorio cara a cara en el sofá, sino mientras hacemos algo como poner la mesa, mientras paseamos o mientras merendamos. Es muy importante evitar preguntas con respuesta simple o corta y hacer preguntas que inviten a la reflexión y a la expresión de pensamientos y opiniones.

Si después de su reflexión, muestras interés en el libro y le pides leer juntos un capítulo o unas páginas leyendo cada uno un párrafo en voz alta y haciendo paradas para comentar lo que se ha leído, te puede ayudar a saber si tu hijo está comprendiendo lo que está leyendo. 

8. ¿Cómo crear en casa un ambiente de lectura?

En mi opinión, estas son las claves para crear un ambiente de lectura en casa:

- Incluirlo en el ritual de sueño como un paso obligatorio antes de dormir.

- Dedicar un espacio de la casa a la lectura con una estantería para los libros teniéndolos siempre a mano y con una silla o butaca al lado que invite a sentarse y leer.

- Darles ejemplo viéndonos coger un libro de papel y relajarnos mientras tanto.

- Respetar sus gustos e ir a la librería a escoger el próximo cuento. Si, por ejemplo, vemos que a nuestro hijo le interesan más los cómics que los libros con mucho texto y parece que por ahora es la única forma de que lea, deberíamos respetarlo.

- Ir a la biblioteca para que se familiarice con ese entorno y tenga a disposición una gran variedad de libros donde poder elegir.

- Comentar y favorecer las conversaciones en torno a los libros y no hacerles un examen.

9. ¿Nos puedes recomendar algunas lecturas infantiles que te parezcan interesantes?

No conozco bien la literatura de los libros de niños mayores, así que recomendaré los libros de 0-6 años que es la franja donde se mueve mi hija. Además de las revistas del grupo Bayard, recomiendo: 

- Buenas noches, Luna, Margaret Wise Brown.

- Las jirafas no pueden bailar, Giles Andreae.

- Adivina cuánto te quiero, Sam MacBratney.

- Pájaro Amarillo, Olga de Dios.

- Cualquier libro de Pequeña&GRANDE.

- Coleccion de libros musicales de Paco.