Cocinar con los niños, diversión con las tareas domésticas

Hay veces que los niños nos hacen perder los nervios por no implicarse lo suficiente en las tareas domésticas, y es que es difícil lograr que comprendan la necesidad de éstas y el trabajo y esfuerzo que conllevan.

Poder contar con su ayuda nos facilitaría mucho las cosas. Así, cuanto antes les hagamos comprender que con respecto a la casa tienen una responsabilidad, tanto mejor. La cocina es una buena manera de que comiencen a implicarse en las labores domésticas

Cómo enseñar a los niños las tareas de casa

Una buena manera de lograrlo es compartir con ellos las tareas, a la vez que se les enseña cómo hacerlas. Un ejemplo perfecto de esto es la cocina.

Podemos dejar que participen en todo el proceso: la elaboración de los menús semanales; explicando por qué deben tomar de todo y no sólo lo que les apetece y cómo equilibrar la dieta.

Otra acyividad es la visita al supermercado, enseñándoles a escoger los mejores productos y a comparar precios; y finalmente la elaboración del almuerzo o cena, eligiendo para ello recetas sencillas en las que puedan participar, como huevos rellenos, bizcochos, alguna ensalada o plato de pasta...

Así aprenderán que deben comer de todo, el valor de los alimentos y el esfuerzo que se invierte desde que se planifica lo que se va a tomar hasta que se lleva a la mesa. Una idea que el niño hará extensiva por sí mismo al resto de quehaceres.